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pruebas de la materia oscura
Las pruebas de la materia oscura

Introducción

En la actualidad, las pruebas de la materia oscura son indirectas y no concluyentes

La materia oscura es una forma de materia que no emite ni refleja luz, lo que la hace invisible a nuestros instrumentos de observación.

A pesar de que no podemos verla directamente, se cree que existe por su supuesto efecto gravitacional en el movimiento de las galaxias y en la distribución de la materia visible en el universo.

La primera mención de la materia oscura fue hecha por el astrónomo Fritz Zwicky (Zwicky, 1933, 110-127), cuando observó que las galaxias del cúmulo de Coma tenían velocidades de rotación más altas de lo que se esperaría si sólo estuvieran compuestas por materia visible.

Zwicky sugirió que había una forma de materia «invisible» que proporcionaba la masa adicional necesaria para mantener juntas a las galaxias del cúmulo.

Desde entonces, se han realizado muchas más observaciones (indirectas) que apoyan la existencia de la materia oscura y se ha postulado que su abundancia es cinco veces mayor que la materia visible (Clowe et al., 2006).

No obstante, no existe evidencia directa de su existencia y los esfuerzos de los investigadores van encaminados hacia el descubrimiento de alguna partícula subatómica (axiones) que sea el ladrillo constituyente de dicha materia y que demostraría su existencia.

¿Pruebas de la materia oscura o indicios de una explicación oculta?

Alabeo de la Vía Láctea

El alabeo de la Vía Láctea es un fenómeno observado en la distribución de estrellas y polvo interestelar en la Vía Láctea.

Su relación con la materia oscura fue propuesto por primera vez por Ostriker (Ostriker et al., 1973) que realizó un estudio numérico de la estabilidad de las galaxias aplanadas.

Consiste en una deformación muy particular  que exhibe nuestra galaxia en la parte externa del disco. El disco incluye los brazos espirales de la galaxia, en uno de los cuales (brazo de Orión) se encuentra nuestro Sistema Solar.

A distancias más allá de 50000 años luz del centro galáctico, donde el componente fundamental es hidrógeno, y la existencia de estrellas es escasa, este gas no se encuentra confinado en el plano galáctico, sino que se desvía de éste, combándose unos 7500 años luz fuera de él.  

En un estudio publicado en 2005 por Los Alamos National Laboratory los investigadores utilizaron modelos matemáticos para simular el movimiento de las estrellas y el polvo interestelar en la galaxia y encontraron que la presencia de materia oscura podría explicar el alabeo observado.

Otro estudio publicado en 2011 en la revista «Monthly Notices of the Royal Astronomical Society» también apoya la teoría de la materia oscura como explicación del alabeo de la Vía Láctea.

Los investigadores utilizaron observaciones de la posición y velocidad de cientos de miles de estrellas en la galaxia para crear un mapa tridimensional de la distribución de la materia en la Vía Láctea.

Descubrieron que la distribución de la materia en la galaxia se inclinaba ligeramente hacia arriba y hacia un lado, lo que sugiere que podría haber una gran cantidad de materia oscura en esa región de la galaxia.

Distribución de galaxias enanas en el entorno de la Vía Láctea

Las teorías actuales sobre la formación de galaxias sugieren que las galaxias grandes, como la Vía Láctea, deben estar rodeadas por un halo esférico de galaxias satélite más pequeñas.

Esto se debe a que las galaxias satélite se forman a partir del material que queda después de la formación de la galaxia principal, y se cree que se mantienen en órbita alrededor de la galaxia principal debido a la gravedad (Vera-Ciro et al., 2014).

Esta predicción ha sido confirmada por diversos estudios observacionales.

Por ejemplo, un análisis de datos de la Encuesta de Galaxias de la Vía Láctea (LGS) ha encontrado más de 50 galaxias satélite en el halo de la Vía Láctea (Ibata et al., 2013).

Además, se ha demostrado que estas galaxias satélite tienen una distribución de masas y órbitas consistente con la teoría de la formación de galaxias (Pawlowski et al., 2012).

La controversia en la distribución de las galaxias

Es cierto que, a pesar de la predicción de que las galaxias grandes deben estar rodeadas por un halo de galaxias satélite más pequeñas, se conocen relativamente pocas galaxias enanas en las inmediaciones de la Vía Láctea.

Además, en lugar de distribuirse de manera uniforme alrededor de la galaxia principal, estas galaxias enanas parecen estar dispuestas principalmente en un plano (Pawlowski et al., 2014).

Esta distribución anormal de galaxias enanas ha sido una fuente de controversia entre los astrónomos. Una posible explicación es que estas galaxias enanas pueden haber sido arrastradas por el disco de la Vía Láctea durante su formación, y por lo tanto se encuentran en órbitas planares en lugar de esféricas (Pawlowski et al., 2014).

Otra teoría es que estas galaxias enanas pueden haber sido capturadas por la Vía Láctea más tarde, después de que se formó el halo esférico de galaxias satélite (Metz et al., 2007).

La distribución anormal de galaxias enanas en las inmediaciones de la Vía Láctea ha llevado a algunos expertos a cuestionar la existencia de la materia oscura.

Una posible solución a la controversia

Sin embargo, varias simulaciones realizadas en los últimos años parecen explicar el fenómeno de la distribución anormal de galaxias enanas a partir de la red cósmica de materia oscura (Libeskind et al., 2011).

Esta red se cree que está formada por filamentos de materia oscura que se extienden por todo el universo, conectando las galaxias entre sí. Estos filamentos podrían haber sido los responsables de la atracción de las galaxias enanas hacia la Vía Láctea.

Aunque esta teoría aún necesita ser confirmada mediante observaciones más detalladas y estudios más profundos, proporciona una explicación prometedora para el fenómeno de la distribución anormal de galaxias enanas en las inmediaciones de la Vía Láctea.

En SecundariaEnRed.com creemos que el conocimiento científico debe hacerse accesible a todo el mundo. Por eso trabajamos porque nuestras clases online se ajusten al nivel de nuestros alumnos para que sean capaces de construir su propio conocimiento guiados por nuestros profesores online.

consejos para aprovechar las clases online
Consejos para aprovechar las clases online de ciencias

Desde la pandemia se ha disparado el uso de internet para impartir clases. Es el momento de conocer algunos consejos para aprovechar las clases online.

Introducción

Que vivimos en la era digital no cabe la menor duda. Miramos a nuestro alrededor y estamos envueltos de dispositivos digitales interconectados.

La educación no es un ámbito alejado de esta situación, sino todo lo contrario.

Las clases online de ciencias para estudiantes de secundaria no son una excepción. Con el imparable incremento de la tecnología y el avance en la conectividad con internet, cada vez más estudiantes tienen la oportunidad de acceder a una educación de calidad desde la comodidad de sus hogares.

Pero para ser eficiente impartiendo clases online, no basta con tener ordenador y conexión a internet.

Hace falta un enfoque claro y una estrategia bien definida.

Por esta razón vamos a centraremos en proporcionar varios consejos para aprovechar las clases online de ciencias en secundaria.

Crear un espacio de estudio adecuado

Quizás estemos muy acostumbrados a recibir mensajes en los que la realización de tareas por internet nos da una «libertad» que no nos brinda otras situaciones más tradicionales.

Observamos a menudo imágenes de supuestos estudiantes en la playa o viajando.

Sin embargo, la realidad es que para que el aprendizaje se dé, es muy importante disponer de un lugar tranquilo y organizado para estudiar.

Se debe favorecer un ambiente propicio para el aprendizaje, sin menospreciar factores como la iluminación y la ausencia de distracciones.

Establecer rutinas y horarios

Obligarse a establecer una rutina y horario es fundamental. Sólo de esta forma se logra un aprendizaje efectivo y duradero.

En las clases online, la disciplina es tan importante como en las clases presenciales.

Para lograrlo es importante dejarse aconsejar por profesores experimentados en este tipo de clases.

Ellos orientarán y aconsejarán, y planificarán junto al alumno un plan factible y realista a lo largo del tiempo.

Los horarios regulares proporcionan una estructura y sentido de orden en el día a día.
Ayuda a priorizar tareas y asignar el tiempo adecuado a cada materia.
Y reduce el estrés, pues crea un marco predecible y factible para las actividades académicas y personales.

Participar activamente en las clases

Las clases online son una oportunidad única de tener un profesor para uno solo.

Por tanto debe aprovecharse esta situación. El alumno debe ser participativo y no sólo dejarse llevar. El alumno, pues, debe involucrarse con un enfoque proactivo.

La participación activa le permitirá mantener su atención y compromiso con el contenido del curso.

Es importante preparar la clase previamente: revisar el material que se tratará, preparar preguntas y dudas que surjan.

Durante la clase se debe mantener la cámara encendida, siempre que sea posible, y establecer un diálogo fluido con el profesor.

Cuando finalice la clase debe revisarse lo trabajado. Si surgen dudas han de aprovecharse para apuntarse claramente y darlas a conocer al profesor mediante algún sistema de mensajería o en la siguiente sesión.

Utilizar recursos digitales de forma efectiva

Una de las herramientas más utilizad en las clases online son las pizarras digitales.

El alumno ve en su pantalla cómo se van resolviendo los problemas, en el caso de las asignaturas de ciencias, e interactúa con el profesor, asimilando el proceso.

Si el alumno dispone de tablet o tableta digitalizadora, también tiene la oportunidad de realizar el mismo los problemas, como si se tratara de un bloc de papel.

El profesor puede así, supervisar con detalle su proceso de aprendizaje.

Otra posibilidad que favorecen las clases online es el uso re vídeos de internet o elaborados por el propio profesor.

En ocasiones, el profesor puede grabar la clase (con el consentimiento del alumno) y este puede revisarla con posterioridad.

Comunicarse con tus profesores y compañeros

Otra posibilidad que favorece el entono online es la comunicación próxima y directa con el profesor.

El correo electrónico, los foros de discusión y los programas de mensajería instantánea tales como Whatsapp o Telegram, favorecen que las dudas e inquietudes de los alumnos lleguen a los profesores de forma inmediata, permitiendo planificar de forma precisa las sesiones de clase y resolver dudas antes de iniciarlas.

Conclusiones

Las clases online no tienen nada que envidiar a las clases presenciales. Tienen muchas ventajas y facilitan sobradamente la comunicación alumno-profesor. Pero no deben dejarse de lado aspectos tan importantes como la planificación de las mismas, el lugar y condiciones de trabajo, el esfuerzo por participar y comunicarse activamente con el profesor.

En SecundariaEnRed.com nos esforzamos por cumplir todas estas condiciones, sustentando nuestro trabajo en profesores titulados de amplia experiencia y conocimientos en innovaciones tecnológicas aplicadas a la educación.

Date una oportunidad, prueba nuestras clases. No te arrepentirás.

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